Impacto humano en los océanos
Hoy en día, vivimos en un mundo globalizado, con una economía que facilita el intercambio global de bienes y personas. El desarrollo de medios de transporte más sencillos ha propiciado la creación de empresas multinacionales que exportan mercancías a todo el mundo. Los ingresos totales del mercado mundial del juguete han aumentado considerablemente en la última década (1). Esta competitividad impulsa a los fabricantes a producir productos más atractivos y baratos, a veces a costa de la calidad. Además, cada vez es más difícil controlar las mercancías que entran en el mercado nacional, ya que una parte importante de los productos es pedida directamente por el cliente a través de Internet de un país a otro.
Los productos de consumo pueden contener sustancias nocivas, como disolventes residuales, monómeros o aditivos (2). Se han registrado quejas de los consumidores sobre los fuertes y desagradables olores de los juguetes y varios estudios han abordado la identificación de los desodorantes en los juguetes (3-5). Estos olores están relacionados con las emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV) de los productos, que también pueden liberar otras sustancias no olorosas pero nocivas. Las sustancias emitidas acaban en el aire interior y pueden influir negativamente en la salud de los ocupantes. La calidad del aire interior es una preocupación creciente, ya que los seres humanos pasan hoy en día el 65% de su tiempo en casa (6) y también permanecen en el interior cuando trabajan o se desplazan. Las tasas de cambio de aire están disminuyendo debido a la mejora de las técnicas de aislamiento (7). El control de la exposición global puede establecerse a menudo mediante pequeñas acciones individuales (8), ya que las fuentes de contaminación más importantes son pequeñas y están cerca de la persona (9). Las principales fuentes de emisión de COV a corto plazo en interiores son los productos de cuidado personal y de limpieza o la cocina. Las emisiones de los muebles y de los materiales de construcción (10) también se consideran fuentes de emisión importantes, ya que dan lugar a emisiones a largo plazo.
Polímeros sintéticos
ResumenEl enorme crecimiento de los plásticos en el mundo ha provocado problemas medioambientales en las últimas dos o tres décadas. La mayoría de estos plásticos, debido a su mala gestión, se eliminan actualmente en vertederos no autorizados o se queman sin control en los campos. El documento expone las preocupaciones medioambientales de tantas aplicaciones de los plásticos. Se discuten los mecanismos más importantes de degradación de los plásticos, los impactos ambientales y las recomendaciones para el desarrollo sostenible, con la opción del reciclaje como la ruta que se está desarrollando más intensamente en este momento debido a su amplio atractivo público y a las evidentes ventajas ambientales.
Tabla de tamaño completoUna proyección más reciente (Figura 5) muestra un crecimiento ligeramente más lento hasta algo más de 1,4 Mt en 2013, pero la tendencia sigue siendo muy positiva. El estudio del SRI proyecta un consumo total de polímeros biodegradables en todo el mundo con una tasa de crecimiento anual media del 13% entre 2009 y 2014 [19].Figura 5Capacidad de producción mundial de bioplásticos (Mt) (adaptada de [[20]]).Imagen a tamaño completoSegún Kurudufu [21], se calcula que cada año se producen 100 millones de toneladas de plásticos. El europeo medio tira 36 kg de plásticos al año. El 4% del consumo de petróleo en Europa se destina a la fabricación de productos de plástico. Algunas bolsas de residuos de plástico se fabrican con un 64% de plástico reciclado. Los envases de plástico suponen el 42% del consumo total, y muy poco se recicla. En 2008, la generación total de residuos de plástico postconsumo en la UE-27, Noruega y Suiza fue de 24,9 Mt. Los envases son, con diferencia, los que más contribuyen a los residuos de plástico, con un 63%. La generación media per cápita de residuos de envases de plástico en la UE-27 fue de 30,6 kg en 2007 [4]. Hay muchos plásticos diferentes, que desprenden muchos vapores distintos cuando se descomponen. La figura 6 muestra los distintos ámbitos en los que se utilizan los plásticos [22].Figura 6
Efectos negativos del plástico en el medio ambiente
Los contaminantes atmosféricos peligrosos (HAP) orgánicos se emiten durante la fabricación de uno o varios de los siguientes polímeros y resinas del Grupo IV: resina de acrilonitrilo butadieno estireno (ABS), resina de estireno acrilonitrilo (SAN), resina de acrilonitrilo butadieno estireno (MABS), resina de metilmetacrilato butadieno estireno (MBS), resina de poliestireno, resina de poli (tereftalato de etileno) (PET) y resina de nitrilo.
En la producción de termoplásticos, se utilizan diversos HAP orgánicos como monómeros o se crean como subproductos. Algunos de estos HAP orgánicos se consideran mutágenos y carcinógenos, y todos pueden causar efectos tóxicos reversibles o irreversibles tras la exposición.
Revista de polímeros y medio ambiente
La degradación de los polímeros es la reducción de las propiedades físicas de un polímero, como la resistencia, causada por cambios en su composición química. Los polímeros, y en particular los plásticos, están sujetos a la degradación en todas las etapas del ciclo de vida del producto, incluyendo su procesamiento inicial, su uso, su eliminación en el medio ambiente y su reciclaje[1] El ritmo de esta degradación varía significativamente; la biodegradación puede llevar décadas, mientras que algunos procesos industriales pueden descomponer completamente un polímero en horas.
Se han desarrollado tecnologías para inhibir o promover la degradación. Por ejemplo, los estabilizadores de polímeros garantizan que los artículos de plástico se produzcan con las propiedades deseadas, prolongan su vida útil y facilitan su reciclaje. A la inversa, los aditivos biodegradables aceleran la degradación de los residuos plásticos mejorando su biodegradabilidad. Algunas formas de reciclaje de plásticos pueden implicar la degradación completa de un polímero de vuelta a monómeros u otros productos químicos.
En general, los efectos del calor, la luz, el aire y el agua son los factores más importantes en la degradación de los polímeros de plástico. Los principales cambios químicos son la oxidación y la escisión de la cadena, lo que lleva a una reducción del peso molecular y del grado de polimerización del polímero. Estos cambios afectan a propiedades físicas como la resistencia, la maleabilidad, el índice de fluidez, el aspecto y el color. Los cambios en las propiedades suelen denominarse “envejecimiento”.