Cómo afecta la microestructura a las propiedades mecánicas
Los polímeros se añaden al betún con la intención general de aumentar la durabilidad de las capas de asfalto mejorando su resistencia a los efectos mecánicos y ambientales. La forma tradicional de producir betún modificado con polímeros (PmB) es la mezcla de un polímero con betún puro. El PmB se clasifica con las letras A, B, C y H, donde A y B corresponden a los elastómeros, C a los termoplásticos y H a los polímeros superiores. Por PmB no se entiende exclusivamente el SBS, sino que también se pueden añadir materiales de desecho y subproductos industriales como el caucho de miga, el azufre polimerizado, los residuos de plástico (PE, PET y similares). Mientras que, por un lado, el uso de polímeros en el betún se considera de importancia crítica, por otro, la contribución del PmB a la carga global con microplásticos en el medio ambiente acuático podría convertirse sin duda en una cuestión política. La legislación europea actual exige el reciclado del asfalto, pero la cantidad es aún ampliable. En este caso, los PmB podrían ser especialmente beneficiosos debido a su estabilidad química a largo plazo, pero también podrían experimentar inestabilidad física debido a la posible segregación de fases y a la precipitación.
Propiedades de los polímeros amorfos y cristalinos
Un polímero es una sustancia compuesta por macromoléculas[2]. Una macromolécula es una molécula de alta masa molecular relativa, cuya estructura comprende esencialmente la repetición múltiple de unidades derivadas, real o conceptualmente, de moléculas de baja masa molecular relativa[3].
es una sustancia o material formado por moléculas muy grandes, o macromoléculas, compuestas por muchas subunidades repetidas[6]. Debido a su amplio espectro de propiedades,[7] tanto los polímeros sintéticos como los naturales desempeñan papeles esenciales y ubicuos en la vida cotidiana[8] Los polímeros van desde los conocidos plásticos sintéticos, como el poliestireno, hasta los biopolímeros naturales, como el ADN y las proteínas, que son fundamentales para la estructura y la función biológicas. Los polímeros, tanto naturales como sintéticos, se crean mediante la polimerización de muchas moléculas pequeñas, conocidas como monómeros. Su masa molecular consecuentemente grande, en relación con los compuestos de moléculas pequeñas, produce unas propiedades físicas únicas que incluyen dureza, alta elasticidad, viscoelasticidad y una tendencia a formar estructuras amorfas y semicristalinas en lugar de cristales.
¿Qué es el ELASTÓMERO TERMOPLÁSTICO? ¿Qué es?
La microestructura es la estructura a muy pequeña escala de un material, definida como la estructura de una superficie preparada del material, revelada por un microscopio óptico de más de 25 aumentos[1] La microestructura de un material (como los metales, los polímeros, las cerámicas o los compuestos) puede influir mucho en las propiedades físicas, como la resistencia, la tenacidad, la ductilidad, la dureza, la resistencia a la corrosión, el comportamiento a alta/baja temperatura o la resistencia al desgaste. Estas propiedades rigen a su vez la aplicación de estos materiales en la práctica industrial.
La microestructura a escalas más pequeñas que las que se pueden ver con los microscopios ópticos suele denominarse nanoestructura, mientras que la estructura en la que se disponen los átomos individuales se conoce como estructura cristalina. La nanoestructura de las muestras biológicas se denomina ultraestructura. La influencia de la microestructura en las propiedades mecánicas y físicas de un material se rige principalmente por los diferentes defectos presentes o ausentes de la estructura. Estos defectos pueden adoptar muchas formas, pero los principales son los poros. Aunque esos poros desempeñan un papel muy importante en la definición de las características de un material, también lo hace su composición. De hecho, en muchos materiales pueden existir diferentes fases al mismo tiempo. Estas fases tienen propiedades diferentes y, si se gestionan correctamente, pueden evitar la fractura del material.
Comportamiento de fase de las mezclas de polímeros y copolímeros
Un polímero es una sustancia compuesta por macromoléculas[2]. Una macromolécula es una molécula de alta masa molecular relativa, cuya estructura comprende esencialmente la repetición múltiple de unidades derivadas, real o conceptualmente, de moléculas de baja masa molecular relativa[3].
es una sustancia o material formado por moléculas muy grandes, o macromoléculas, compuestas por muchas subunidades repetidas[6]. Debido a su amplio espectro de propiedades,[7] tanto los polímeros sintéticos como los naturales desempeñan papeles esenciales y ubicuos en la vida cotidiana[8] Los polímeros van desde los conocidos plásticos sintéticos, como el poliestireno, hasta los biopolímeros naturales, como el ADN y las proteínas, que son fundamentales para la estructura y la función biológicas. Los polímeros, tanto naturales como sintéticos, se crean mediante la polimerización de muchas moléculas pequeñas, conocidas como monómeros. Su consiguiente gran masa molecular, en relación con los compuestos de moléculas pequeñas, produce propiedades físicas únicas, como dureza, alta elasticidad, viscoelasticidad y tendencia a formar estructuras amorfas y semicristalinas en lugar de cristales.