Peligros de la contaminación por plásticos
En muchos casos, las láminas y los envases de plástico se eliminan después de su uso; sin embargo, debido a su durabilidad, estos plásticos se encuentran en todas partes y son persistentes en el medio ambiente. La investigación sobre el seguimiento y los impactos de los residuos plásticos está todavía en una fase incipiente, pero hasta ahora los informes son preocupantes. En el entorno laboral y residencial de las personas, los plásticos fabricados con polímeros a base de petróleo están presentes en gran cantidad. Al final de su vida útil, estos plásticos suelen verterse junto con los residuos sólidos urbanos. Los plásticos tienen varios componentes tóxicos, entre los que se encuentran los ftalatos, las sustancias químicas polifluoradas, el bisfenol A (BPA), los retardantes de llama bromados y el trióxido de antimonio, que pueden filtrarse y tener efectos adversos para el medio ambiente y la salud pública. Los plásticos presentes en los residuos electrónicos (e-waste) se han convertido en una grave preocupación mundial para el medio ambiente y la salud pública debido a su gran volumen de producción y a la presencia de políticas de gestión inadecuadas en varios países. Los informes de China, Nigeria e India indican que las sustancias peligrosas del plástico de los residuos electrónicos pueden migrar más allá de los lugares de procesamiento y llegar al medio ambiente [9-11].
Efectos del plástico en la salud humana
El BPA se encuentra en los plásticos de policarbonato y en las resinas epoxi. Los plásticos de policarbonato se utilizan a menudo en recipientes que almacenan alimentos y bebidas, como las botellas de agua. También pueden utilizarse en otros bienes de consumo.
Algunas investigaciones han demostrado que el BPA puede filtrarse a los alimentos o bebidas desde los envases fabricados con BPA. La exposición al BPA es preocupante por los posibles efectos en la salud del cerebro y la próstata de los fetos, los bebés y los niños. También puede afectar al comportamiento de los niños. Otras investigaciones sugieren una posible relación entre el BPA y el aumento de la presión arterial, la diabetes de tipo 2 y las enfermedades cardiovasculares.
Sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) ha afirmado que el BPA es seguro en los niveles muy bajos que se dan en algunos alimentos. Esta evaluación se basa en la revisión de cientos de estudios. La FDA sigue supervisando la investigación.
Contaminación por plásticos referat
Los plásticos sintéticos producidos a partir de monómeros derivados del petróleo, como el etileno, el propileno, el estireno y el tereftalato de polietileno, son polímeros no biodegradables que sufren una lenta fragmentación hasta convertirse en partículas de tamaño micrométrico (Kubowicz y Booth, 2017). Casi el 60% de todos los plásticos producidos entre 1950 y 2015, lo que equivale a 4.900 toneladas métricas, se encuentran en vertederos o en el entorno natural. Otras 800 toneladas métricas fueron incineradas y 600 MT recicladas. Solo el 10% de los plásticos reciclados se han reciclado más de una vez (Geyer et al., 2017).
La carga medioambiental impuesta por la producción de polímeros derivados del petróleo puede atribuirse a su persistencia en el medio ambiente y a su impacto en el cambio climático. Sobre lo primero, las pruebas sugieren una compleja toxicología de los microplásticos en la vida marina y en la cadena alimentaria (Worm et al., 2017). En cuanto a lo segundo, cada etapa del ciclo de vida actual del plástico genera gases de efecto invernadero (GEI): extracción y transporte de combustibles fósiles, producción de monómeros, refinado y fabricación de plásticos y gestión de residuos plásticos. Las estimaciones indican que, si la producción de plástico crece al ritmo actual, en 2050 las emisiones acumuladas derivadas de su uso podrían suponer más de 56 gigatoneladas de carbono. Esto equivale al 10-13% del presupuesto de carbono restante (Hamilton et al., 2019).
Efectos de la contaminación por plásticos en el ser humano
Las sustancias poliméricas extracelulares (EPS) son polímeros biosintetizados por varias cepas de microorganismos. Compuestos principalmente por polisacáridos, proteínas y ADN, la producción de estos limos se desencadena principalmente por señales ambientales. Dado que su biosíntesis es energéticamente costosa, deberían generar algún tipo de ventaja al microorganismo productor (Flemming y Wingender, 2010). Por ello, la producción y las funciones de los EPS se han estudiado durante décadas.
Los polisacáridos son los componentes más estudiados de los EPS. La investigación de los EPS de numerosas cepas de microorganismos ha demostrado que los polisacáridos de estos biopolímeros varían enormemente en su composición y estructura. Pueden estar compuestos por una o muchas unidades estructurales, y la disposición de estas unidades es también exclusiva para cada tipo diferente de EPS (Roca et al., 2015). Además de los carbohidratos, recientemente ha aumentado el interés por las proteínas estructurales, las enzimas y el ADN extracelular (exADN). El análisis del exADN presente en los EPS de una variedad de cepas ha demostrado que el ADN no es inocuo, sino que puede ser una fuente de intercambio genético, de señalización, de fijación y, además, un componente estructural muy importante (Flemming y Wingender, 2010).